Esta hermosa poesía me ladió mi hijo Daniel Alejandro,
en una actividad de su colegio.
Hoy tengo para darte
el mundo que imagino,
donde caben los sueños
—los tuyos y los míos—.
el mundo que imagino,
donde caben los sueños
—los tuyos y los míos—.
Hoy tengo para darte
esas palabras buenas,
con las que intento siempre
enhebrar un poema.
esas palabras buenas,
con las que intento siempre
enhebrar un poema.
La luna de mi cielo,
el sol de mi vereda
y un pincel con los rojos
de alguna primavera.
el sol de mi vereda
y un pincel con los rojos
de alguna primavera.
Hoy tengo para darte
los misterios del viento,
esta risa que río
y esta pena que siento.
los misterios del viento,
esta risa que río
y esta pena que siento.
Un abrazo cerrado,
una mano en el hombro,
una atenta mirada
y un retazo de asombro.
una mano en el hombro,
una atenta mirada
y un retazo de asombro.
Hoy tengo para darte
la magia repetida
de andar el mismo paso
y compartir… ¡la vida!
la magia repetida
de andar el mismo paso
y compartir… ¡la vida!
Muy buenas, que preciosas es. un saludo
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